La Paz – Viernes 1 de Diciembre de 2017 | Unidad de Comunicación
La ministra de Salud, Ariana Campero Nava, afirmó este viernes en Santa Cruz, que es necesario despatriarcalizar el sistema de salud y las universidades para garantizar el acceso a un parto seguro y humanizado.
“Es una transformación que se da poco a poco. El proyecto de Código del Sistema Penal completará el cambio necesario en la justicia, propone un nuevo procedimiento especial para infracciones de violencia contra la mujer”, afirmó la autoridad nacional, durante el acto de clausura del coversatorio sobre despatriarcalización en la legislación boliviana.
El evento internacional reunió a la representante de la ONU Mujeres en Bolivia, Carolina Taborga; al Coordinador Residente de Naciones Unidas y Representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Mauricio Ramírez.
Asimismo, participó la presidenta de la Comisión de Constitución, Legislación y Sistema Electoral, Susana Rivero; además de delegadas de organizaciones vinculadas a mujeres de Argentina, Perú, Brasil, entre otras autoridades nacionales y de países vecinos.
El tema del aborto fue parte del conversatorio. Se reconoció que el aborto es la tercera causa de muerte materna en Bolivia.
“Estamos trabajando en este tema. Urge hacer énfasis en la educación, salud y principalmente derechos sexuales y derechos reproductivos, temas que se deben trabajar de forma intersectorial desde un enfoque intercultural”, añadió.
Las y los asistentes coincidieron en la necesidad de transformar las normas vigentes para erradicar la retardación de justicia y la chicana e incorporar la especialización de los operadores de justicia.
El objetivo es romper la complicidad patriarcal en la valoración de las pruebas y el juzgamiento, además de ampliar las causales para la práctica legal del aborto que en las actuales condiciones es otra forma de violencia contra la mujer.
Del mismo modo abordaron el tema del acoso callejero como parte de otro tipo penal.
Las participantes coincidieron en que todas estas reformas judiciales buscan despatriarcalizar la justicia, mejorar el acceso de las mujeres a la justicia y lograr una mejor prevención, atención y protección a mujeres víctimas de violencia.
Por otro lado, se dejó establecido que la paridad de género en la representación política es una conquista vinculada a los cambios constitucionales que han transformado la participación política de las mujeres en Bolivia.
No obstante, aún hay muchas dificultades asociadas al acoso y violencia política.
“El compromiso es no retroceder. Existe la necesidad de profundizar los cambios, para que los avances se conviertan en reales para bien de la vida de las mujeres”, finalizó Campero.